😒Colaboradores desmotivados !No siempre es cuestión de actitud!

No es falta de actitud: es falta de auto percepción . Y sí puedes cambiarlo.

Hay personas en tu equipo que parecen desmotivadas, se quedan al margen o simplemente evitan colaborar. Pero no es que no les importe. Lo que pasa es que no creen que son capaces de lograrlo. Y eso se puede transformar.

Desde Grupo Motiva lo vemos constantemente en nuestras capacitaciones: cuando fortalecemos la autoeficacia —esa creencia personal de “yo puedo”— los resultados cambian. Por eso este estudio científico nos parece fundamental.


¿Qué reveló el estudio?

El artículo “Can a self-efficacy-based intervention decrease burnout, increase engagement, and enhance performance?” de Bresó, Schaufeli y Salanova (2011) analizó qué pasa cuando se interviene directamente sobre la autoeficacia de los colaboradores.

Durante 4 meses, se aplicó una intervención cognitivo-conductual en un grupo de estudiantes universitarios —muy comparable con entornos laborales jóvenes o en desarrollo. ¿Los resultados?

• Aumentó significativamente su nivel de compromiso,
• Mejoró el desempeño,
• Y se redujo el agotamiento emocional.

Los participantes no recibieron premios ni incentivos. Simplemente aprendieron a verse capaces. Y eso marcó la diferencia.

¿Qué podemos aplicar desde el mundo laboral?

Aquí van 3 estrategias prácticas que puedes empezar a incorporar con tu equipo. (Y que, por cierto, están integradas en nuestras certificaciones online).

1. Desarrollar la autoeficacia a través de micro-retos guiados.

Pequeñas tareas con acompañamiento y feedback generan un ciclo positivo: logro → confianza → más implicación.

Ejemplo: Diseña un mini-proyecto de 1 semana para alguien que duda de sí mismo, pero con el apoyo de un mentor o coach. Cuando lo logra, cambia su narrativa interna.
Mira un ejemplo de acompañamiento 1 a 1 de Coaching aquí: https://cursos.gmotiva.com/courses/coach

2. Crear una cultura donde el error no sea castigo, sino aprendizaje.

La autoeficacia se frena cuando el error se castiga. Se potencia cuando se usa como trampolín.

Ejemplo: En reuniones de equipo, dedica 5 minutos a compartir “un error que me enseñó algo”. Así se normaliza el aprendizaje y se reduce la parálisis por miedo.


También puedes apoyarte en un conjunto de dinámicas para realizar con tu equipo, aquí encontrarás una selección de dinámicas profesionales: https://cursos.gmotiva.com/courses/dinamicas

3. Entrenar líderes para dar feedback que fortalezca, no debilite.

Muchos líderes dan retroalimentación sin saber que están minando la autoconfianza de su equipo. Eso se entrena.

Ejemplo: En nuestras certificaciones, los líderes aprenden a usar el modelo “E+C+P” (Específico + Constructivo + Potencial): no solo corrigen, sino que refuerzan lo que sí funciona y proyectan posibilidades.

¿Y qué tiene que ver esto contigo?

Todo. Porque si estás liderando personas, también estás liderando sus creencias. Y cuando un colaborador cree en sí mismo, cambia todo: se involucra, aprende, propone, mejora.

Por eso, en Grupo Motiva creamos programas de formación online que no solo enseñan técnicas, sino que generan transformaciones reales en la forma de liderar.

¿Querés que tu equipo colabore más? Comienza por aprender todo lo que te enseñamos en nuestro programa de liderazgo aquí: 

https://cursos.gmotiva.com/courses/liderazgo

Referencia del estudio:
Bresó, E., Schaufeli, W. B., & Salanova, M. (2011). Can a self-efficacy-based intervention decrease burnout, increase engagement, and enhance performance? Higher Education, 61(4), 339-355.

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